Amado
Padre Celestial,
Te
pedimos que encontremos la paz y la armonía mientras crecimos en la gracia.
Enséñanos a ser cariñoso y a tener comprensión uno hacia el otro.
Ayúdenos
a usar nuestras palabras para edificar y construir el uno al otro.
Denos
sabiduría para hablar y fuerza para controlar nuestras lenguas cuando estamos
enojados.
Ayúdenos
a encontrar lo bueno en cada uno, para fomentar amor, y para dejar de lado las
pequeñas cosas que nos molestan.
Denos
fuerza para ser pacientes y amables, y sabiduría para dejar de ser orgullosos.
Enséñanos
lo que realmente significa ser Sus hijos e hijas, miembros de una congregación,
y lo que debemos hacer para cumplir con nuestras responsabilidades como
miembros de Su cuerpo.
En
el nombre de Jesús oramos. Amén.
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